Antes de lanzarte a aprender algo nuevo, buscar trabajo, de pagar por un curso de formación o sacar un nuevo producto al mercado, antes de montar un negocio hay una pregunta importante que debemos hacernos y que nos ayudará a tomar buenas decisiones.

¿En qué soy bueno/a?

Si vas a montar un negocio en el sector agrícola, ¿no analizarías antes la calidad del suelo, el tipo de riego, las temperaturas, el nivel de humedad o las plagas más comunes del área? Lo harías porque la tierra, en este caso es tu recurso principal. Tienes que saber si es una tierra fértil que va a dar frutos o tienes que trabajarla mucho antes de que sea cultivable.

En este caso tú eres la tierra de tu negocio y hay que realizar un análisis de la calidad de esa tierra, de tus habilidades, limitaciones, destrezas y experiencias. Así sabrás si puedes cultivar rosas o es tierra excepcional para avena.

 

ANÁLISIS DE RECURSOS PERSONALES

  • Experiencia laboral

Los diferentes trabajos que has realizado a lo largo de tu vida laboral te han dado herramientas y conocimientos que facilitarán la puesta en marcha de tu negocio. Redacción y diseño de presentaciones, llamadas de atención a clientes, planificación y organización, uso de tecnología o de herramientas específicas…depende de los diferentes trabajos que hayas hecho. Esta fuente de práctica es sin duda una de las más valiosas.

 

  • Formación teórica

Oficial o autodidacta. Los conocimientos que tienes sobre las diferentes áreas de la vida te ayudarán a darle forma a tu negocio. La carrera que hayas estudiado, los cursos que hayas hecho dentro de organismos oficiales o a través de internet. El conocimiento en un campo concreto te permitirá desarrollar negocios en esta área con más facilidad. ¿Qué has aprendido que es de valor? ¿Qué material teórico? ¿Qué herramientas o habilidades?

 

  • Una afición que conozco en profundidad

La música, la cocina, la escritura, la natación, pilates… Si has tenido una afición que conoces en profundidad habrás aprendido técnicas, conocerás modelos, tendrás contactos en el área. La afición es una de las fuentes principales de desarrollo de emprendedores, el mundo del ocio se desarrolla cada vez más a través de la venta de productos y servicios que conllevan cierta novedad. El requisito básico para que la afición aporte valor a tus habilidades de emprendedor es que la conozcas en profundidad, que seas una especie de amateur cuasi profesional.

 

  • Habilidades diversas aplicables a numerosos negocios.

¿Durante una época fuiste un apasionado de la fotografía o del buceo? ¿Te uniste a la oleada de triatlones y montañeros que surgió hace unos años? ¿Eres runner, madre experta en la crianza natural o coses tu propia ropa? ¿Amante de los gimnasios, de las dietas o de lo ecológico?

Todos hemos pasado por épocas en las que profundizamos en áreas  y que luego abandonamos. Sin embargo, parte de esos conocimientos y esos contactos siguen ahí.

 

  • En qué dicen los demás que soy bueno

Las habilidades naturales son uno de los mayores activos de un emprendedor. ¿En qué dicen los demás que eres bueno? Vendiendo, comunicando, con los niños, como cuidador, como organizador, en la limpieza, haciendo videos, dibujando, conociendo gente… tu habilidad natural te facilitará el desarrollo de tu negocio. Si los demás son capaces de detectar en nosotros una habilidad es que, posiblemente, la tenemos más desarrollada de lo que creemos.

 

  • En que creo que soy bueno/a

Somos buenos en algo cuando lo hacemos con facilidad, cuando no nos cuesta trabajo ejecutarlo. Es lo que se conoce como el flow o el Elemento. Es ese momento en el que estás trabajando en algo y el tiempo se pasa volando, donde no sientes la presión. Algo que haces con facilidad y que tú sabes que te destaca entre los demás. No quiere decir que seas el mejor en eso, pero sí que eres mejor que otros o que tu ejecución es destacable. ¿Sabes cuál es tu elemento? Puede ocurrirte cuando dibujas, bailas, organizas fiestas o ficheros, hablas en público, redactas, trabajas con máquinas, asesoras o cuidas de otras personas, haces que la gente se divierta, conoces gente, tomas fotografías, cuidas animales, luchas por causas sociales, intervienes en el proceso de formación de alguien, trabajas en algo relacionado con la música o la moda…

Estas seis áreas te permiten analizar los recursos con los que cuentas.
Parte fundamental del proceso para montar tu propio negocio o para encontrar empleo.

 

Ahora llega tu momento. Realiza tu propio autodiagnóstico antes de dar un paso más en el mundo del emprendimiento. Recuerda que no tienes que especificar los trabajos que has hecho o las experiencias o aficiones vividas sino las herramientas y habilidades adquiridas mientras trabajabas, estudiabas o vivías diferentes experiencias.